En el techo de las oficinas de nuestra Escuela Irma Salas Silva, fue descubierto un botadero de basura, consistente en restos de manzana y envoltorios de galletas y comida chatarra que sería tirada por un grupo de alumnos que se ubican el pasillo que esta afuera de la sala de computación.
Este hecho lamentable, está ocurriendo debido a que los alumnos prefieren consumir helados o golosinas y también por no considerar que las frutas tienen un aporte nutricional.
En opinión de Isabel Mellado Rubilar, encargada de la Biblioteca que se encuentra cerca de este foco de basura, este hecho es considerado feo por los apoderados que vienen a retirar los libros del Plan Lector, quienes critican su labor, exigiéndole la limpieza de ese lugar.
Por Ramón Mena
Fotografía: David Avezón. Profesor de Educación Musical
6º Básico A
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